Orvieto

Orvieto

Orvieto, URBS VETUS o “ciudad antigua”, fue la capital del PUEBLO ETRUSCO y un milenio más tarde residencia de Papas y centro de la Cristiandad. Por eso se construyó la iglesia con la fachada más bella de todas las iglesias italianas. En su interior se guardaba celosamente el “ Corporal” o lino sagrado manchado con las gotas de sangre  que manaron de una Ostia recién consagrada.  Es el  DUOMO DE ORVIETO, donde el valor estético de la Belleza como símbolo del Bien y de lo Eterno es el hilo conductor. Hasta aquí la ciudad en superficie, la que ocupa la cima del promontorio rocoso. Otra es la ciudad que yace debajo, telúrica y misteriosa, que se desvela sólo si te acercas a ella, es la Orvieto subterránea, un laberinto de grutas, cavernas, pozos, cisternas y canteras. Si es que los ETRUSCOS sabían de eso, no podía ser de otra manera.

 

Orvieto en medio día

Empezamos en la misma CATEDRAL DE ORVIETO, o Duomo. Dedicada a la Asunción de la Virgen María, se construye como relicario que albergara el testimonio fiel del misterio de la  Eucaristía: un paño de lino con restos de sangre que brotaron de una Ostia consagrada. En la Capilla del Corporal se guarda todavía esta reliquia que daría lugar a la fiesta del Corpus Christi. En el lado opuesto otra capilla está dedicada al JUICIO FINAL de LUCA SIGNORELLI, que muestra en versión renacentista la Resurrección de la Carne, el Infierno al que serán destinados los pecadores y el Paraíso de los Elegidos y Bienaventurados.

Recorreremos la Vía del Duomo y pasaremos por la TORRE DEL MORO. En la PLAZA DE LA REPUBBLICA se sitúa la iglesia más antigua de la ciudad dedicada a SAN ANDRÉS. Desde allí nos desplazaremos hasta el POZO DELLA CAVA para perdernos en una serie de grutas excavadas, usadas desde la Antigüedad como canteras, hornos de cerámica, bodegas y almacén de embutidos, incluso se excavó un pozo para llegar al manto freático de aguas subterráneas que abastecían de agua potable a la ciudad.

 

Y para completar el día Museo Opera del Duomo y Pozo de San Patrizio.
En el MUSEO OPERA DEL DUOMO se  recorre la historia de la Catedral a través de las obras de arte de pintura y escultura que decoraron el interior del templo.
En la BIBLIOTECA ALBÈRI un mono sabio y con lentes a lo Quevedo nos advierte que “leer sin entender equivale a no leer”.
POZO DE SAN PATRIZIO.  Un viaje al centro de la tierra de 248 peldaños y 62 metros de profundidad.
Dos escaleras acaracoladas  que permiten subir y bajar sin que te vean.